* *¡¡Post iniciado en 2020!! Vamos a ver si le damos salida…
Con el confinamiento, hemos tenido que hacer un pequeño intensivo de matemáticas según el método montessori (las matemáticas que, una vez las conocemos, todos hubiéramos querido tener).
En el cole hay unos materiales preciosos pero ¿y en casa? ¿Qué hacemos? Pues arremangarnos y ponernos manos a la obra, ya que estas matemáticas manipulativas, las podemos crear (o imprimir) en casa con facilidad.
Con las matemáticas montessori, llevamos lo abstracto a lo visual y lo táctil. Lo importante no es aprenderse de carrerilla unas tablas de multiplicar (como hemos hecho todos), si no entenderlo, verlo, tocarlo, y practicar. Iremos de lo simple a lo complejo, de lo concreto a lo abstracto, entendiendo los conceptos casi sin enterarnos.
A través de esta experiencia del ambiente, con apariencia de juego, examina las cosas y las impresiones que ha recibido en su mente inconsciente. Por medio del trabajo se hace consciente y construye el Hombre. El niño se halla regido por una potencia misteriosa, maravillosamente grande, que va incorporando lentamente; de este modo, se hace hombre y lo consigue por medio de sus manos, por medio de su experiencia: primero a través del juego, y luego mediante el trabajo.
María Montessori. La mente absorbente, capítulo 3.
El uso de los materiales, nos llevará a mejorar la habilidad de los movimientos de la mano también a un refinamiento en la percepción de estímulos.
Los resultados que se constatan en nuestros niños contrastan bastante con el hecho de que en general, en las escuelas, las matemáticas son un escollo en vez de una materia atractiva y que a este respecto en la mayor parte de las personas son frecuentes las barreras mentales. Por consiguiente, concluyamos diciendo que: todo es fácil si el conocimiento ha echado sus raíces en la mente absorbente.
Los objetos matemáticos, no se hallan dispersos en el ambiente como los árboles, las flores o los animales. Por ello, en la edad infantil, no hay ocasión para desarrollar espontáneamente la mente matemática, lo que determina un obstáculo para el posterior desarrollo mental. Por esto a los materiales sensoriales los llamamos ABSTRACCIONES MATERIALIZADAS o material matemático básico.
María Montessori. La mente absorbente, capítulo 17.
Todos los materiales están diseñados con una finalidad en concreto, como podéis ir viendo a lo largo de este post, gira todo en torno al «10».
Vamos a empezar por lo más básico: los números y el conteo.
Los números
Primero tendremos que conocer los números, no solo su nombre, si no su forma.
- Para eso, utilizaremos (antes de aprender a escribirlos) los números de lija. ¿Cómo lo hacemos en versión DIY? pues cartón duro, cola blanca y sal/azúcar/arena, lo que tengáis a mano. Empezáis por el 0, dibujáis lentamente el número con el dedo, pasándolo por encima del número, mientras decís su nombre despacio: cero. Luego invitáis al niño a que haga lo mismo.
- Una vez ya tengamos esto controlado, buscamos una bandeja, recipiente o plato hondo y ponemos pan rallado, arena o lo que tengáis. Ahora es el momento de que fijándose en el número, lo dibuje con su dedo. Después, ya puede pasar a dibujarlo en una pizarra o en un papel.
* Podemos imprimir los números en el ordenador (o dibujarlos) y pegarlos sobre el cartón.
Caja de husos
Ya os hablamos de la caja de husos aquí (nosotros tenemos una «no oficial» de Aliexpress).
En casa, podéis hacerla con una caja de zapatos (o simplemente con papel) y con palillos chinos, por ejemplo. O si en una salida podéis coger palitos pequeños, también sirve.
Con los husos «tocaremos» cada número, comprendiendo también el significado de «cero». Cómo todos los materiales montessori, son ensayo-error, ni mucho menos hay que decirle al niño «te has equivocado», lo comprobará al ver que le sobra/falta un huso.
Números y contadores
Con las tarjetas que hemos hecho de números, buscamos algo que nos sirva de contadores. Nosotros solemos utilizar fichas translúcidas de la mesa de luz o alubias/garbanzos.
Si vuestros hijos, por ejemplo, están en periodo de dinosaurios y solo quieren eso, pues dibujáis dinosaurios, cogéis muñecos de dinosaurios, etc y a contar dinosaurios, le damos la vuelta a la tortilla y ¡listo!
Podéis ponerlos al lado de los números, o utilizar una huevera con el número escrito en el fondo e ir poniendo tantas unidades como el número nos indique.
Cadenas de perlas
El material original, es un colgador de cadenas del 1 al 10, con una base de madera en la que tenemos un triángulo para formar la pirámide, con ensayo-error. Si no lo ponen en el correcto orden, no cabe en la pirámide.
La versión DIY no queda tan espectacular, claro…
Aquí ya nos metemos en una manualidad muy de moda. Hemos hecho cadenas de perlas con perlas de Hama (las nuestras son las midi, con las grandes, serán más manejables).
Podemos hacerlas de 2 maneras diferentes: planchando y dejándolas planas para cogerlas en bloque o introduciendo un limpiapipas (como si fueran cuentas) y haciendo una especie de gancho (como el original).
Los colores para las cadenas de perlas son (el color no es idéntico, pero es lo que conseguimos durante el confinamiento…):
- Rojo
- Verde
- Rosa
- Amarillo
- Azul claro
- Morado
- Blanco
- Marrón
- Azul oscuro
- Ámbar/naranja
Otra opción, es que peguéis X garbanzos (para que los niños puedan tocarlos) en un trozo de cartón, y los pintéis del color correspondiente, formando de igual manera, una pirámide.
Con esto, el niño asocia el color con la longitud, sabe que el rojo no es un el 7, entiende que son distintas longitudes…Luego esto nos ayuda a hacer sumas (1+4 es igual de largo que 2+3, que 1+1+3, etc) de manera manipulativa.
Listones rojos
Los auténticos listones, son 10, de madera (de haya), midiendo el menor de ellos, que correspondería al 1, 10 centímetros y el más largo (el número 10) 100 centímetros (1 metro). Los niños lo trabajan en el suelo, así que también aprenden al transportarlo, que el más pequeño, es el que menos pesa.
Pero podemos hacerlo en papel a la escala que queramos, o con perlas Hama también.
Con esto, los podemos ordenar de largo a corto. Cada listón grande, se diferenciará del siguiente de menor tamaño en 10 cm (lo que mide el listón número 1, que podemos usar como corrector),
Listones rojos y azules
Los listones rojos y azules son 10 listones que van alternando los colores rojo/azul (impar/par, vamos bicolores).
Si colocamos estos listones con los listones rojos, se complementan formando un cuadrado, y pudiendo el niño observar y tocar que el 1 se complementa con el listón del 9 formando un 10.
Cuando los ordenemos, podemos usar las tarjetas de números para colocarlas al lado de los listones.
La realización sería igual que en el caso de los listones rojos. Os mostramos aquí nuestro resultado (nuestra base no nos ha dado para hacer el listón del 10 al haber hecho cada color de 3×3).
Comentaros también que, cuando salieron el año pasado (2019) los cuadernos montessori de Klara Moncho(Creciendo con montessori y colaboradora de Mumuchu), los compramos de cabeza. Nuestros peques estaban contentos porque era «como en el cole». Podéis usar los recortables que tienen para hacer las actividades propuestas o (si no los pegáis en el cuaderno de verano), usarlos para hacer vuestras propias operaciones. En su página, dispone de muchos imprimibles gratuitos que os pueden ser de utilidad si vais limitados de tiempo, pero recordad que son materiales que se pueden HACER (un problema del confinamiento, ha sido los materiales que mandaban para imprimir…y la gente que no tenía impresora ¿verdad?).
¿Qué os parecen nuestras matemáticas montessori DIY? Próximamente*, avanzaremos al maravilloso mundo de las sumas (matemáticas montessori DIY-II), los decimales…
* Nos ha costado más de 2 años terminarlo…a ver el siguiente 🫣🫣
Os dejamos un enlace de un artículo que escribió Alessandra Mosquera de Nuestros momentos Montessori para Bonicos Montessori sobre los materiales, en él tenéis diversos enlaces que la pueden resultar útiles.